Cuando empezamos a jugar al pádel no damos gran importancia al lado de la pista en el que debemos actuar. Sin embargo, con el paso de los partidos vamos comprobando que éste no es asunto menor.
Jugar en el lado de la derecha o en la izquierda es determinante para cualquier practicante del pádel, incluso para aquéllos jóvenes que empiezan a despuntar desde categorías inferiores.
A diferencia del tenis en su modalidad de dobles, donde ambos jugadores intercalan sus posiciones, en el pádel sí debemos tener clara la posición de cada uno de los jugadores debido a la trascendencia que tiene cada golpe.
En el pádel, cada bola tiene una importancia crucial y un golpeo sin apenas intención puede dejarnos ‘vendidos’ ante un rival de cierto nivel. Además, el factor de los cristales o el giro en cada esquina influye de una manera decisiva en el juego para que cada uno tenga claro cuál es su lado ideal.
No cabe duda de que el juego y las funciones de un jugador de derecha son diferentes a las de un jugador de revés, que se sitúa en el lado izquierdo de la pista. Vamos a ahondar en estas diferencias y en la importancia de contar con un compañero zurdo para disponer de más ventajas en los partidos.
El jugador de derecha, inteligente y estratégico
Empezamos hablando del jugador de derecha, que habitualmente tiene funciones más ‘básicas’ o, dicho de otro modo, más simples de explicar. Es un jugador de amplios recursos, completo en su repertorio de golpes y el encargado de ‘preparar’ el punto para que el jugador de revés puede ganarlo. Por decirlo de otra manera, es el jugador más táctico de la dupla y el más inteligente para leer el juego. Su porcentaje de errores no forzados suele ser menor que el del jugador de revés, así como dispone de un mayor control y técnica desde el fondo de la pista.
Entre sus requisitos fundamentales, el jugador de derecha debe tener gran seguridad en sus golpes para no complicar el punto. El globo debe ser un golpe que debe manejar a la perfección, así como la volea y la bandeja.
Matías Díaz es un claro ejemplo del prototipo de jugador de derecha. Al tratarse de un jugador zurdo, su repertorio de golpes es mayor que el habitual para su posición y por eso es considerado uno de los mejores jugadores del circuito –actualmente, ocupa la octava posición del ránking WPT-.
El jugador de Star Vie Padel es un maestro en la materia y un especialista del lado derecho. Lleva años actuando en esa posición y este año junto a Maxi Sánchez forma una de las duplas más temibles del World Padel Tour.
El jugador de revés, ofensivo por naturaleza
Toca hablar del jugador de revés, de sus responsabilidades y funciones. Como ya hemos comentado anteriormente, tiene la misión de ser el jugador más ofensivo del equipo. Gracias al trabajo ‘sucio’ que realiza su compañero de derecha, por norma general tendrá más posibilidades de finalizar el punto con mayor porcentaje de acierto.
El jugador de revés tiene un peso más decisivo en el juego y abarca más pista. Uno de sus objetivos es ir a por las bolas que vienen por el centro, especialmente en aquellos globos que pueda rematar, al disponer de un campo de visión mayor que el de su compañero.
Normalmente, son jugadores de gran envergadura y de un perfil más ofensivo. Es importante que disponga de buenos golpes de potencia, sobre todo en el remate, para conseguir los máximos puntos ganadores posibles en un partido.
En este caso, podemos nombrar a Agustín Gómez Silingo como un buen ejemplo de jugador de revés. Apodado ‘La Bestia’, el integrante de Akkeron Padel destaca ante todo por su potencia en el remate y es todo un espectáculo cuando golpea la bola en suspensión debido a su enorme envergadura (1,86 metros).
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