Palas de segunda mano: ¿por qué sí, o por qué no?

Palas de segunda mano: ¿por qué sí, o por qué no?

Renovar nuestra pala no suele ser una tarea sencilla. Son varios los factores que hay que tener en cuenta a la hora de adquirir un nuevo modelo: precio, tipo de gama, durabilidad, peso… Pero probablemente, de todos ellos, el primero que tenemos siempre en cuenta es el precio. Por eso, desde hace unos años, el mercado de segunda mano ha ido cobrando cada vez más importancia en nuestro país.

A pesar de que el precio de las palas se ha ido reduciendo con el paso del tiempo –la mayor oferta existente por parte de las marcas ha permitido que el cliente sea el gran beneficiado en este sentido-, la crisis económica abrió una vía alternativa con la compraventa de productos ya utilizados, una moda de la que el pádel no ha sido ajeno.

En el deporte de las cuatro paredes, es habitual cambiar de pala con cierta asiduidad. En la mayoría de casos, los jugadores –ya sean profesionales o amateurs- no terminan de encontrarse cómodos con su ‘arma’ dentro de la pista o simplemente buscan dar un salto en su juego y necesitan un modelo perteneciente a una gama más alta. En ambos casos, los jugadores empiezan a meditar la opción de cambiar de pala, colocando el cartel de ‘se vende’ en la suya.

El mercado de segunda mano siempre ha sido una opción rentable tanto para los que buscan desprenderse de una pala que ya no necesitan como para aquellos que quieren adquirir otra sin necesidad de realizar un fuerte desembolso económico. Y es que el ahorro que supone para el que adquiere una pala, y la posibilidad de ganar un dinero extra para la persona que vende es la principal ventaja en estas transacciones.

Las posibilidades de adquirir una pala de segunda mano son amplias. Incluso hay tiendas de venta online especializadas en pádel de segunda mano como Padel Nuestro que cuentan con una sección destinada a las palas de segunda mano con el objetivo de satisfacer la demanda de algunos usuarios.

Ventajas y desventajas

Como todo en la vida, la compraventa de palas ofrece ventajas y desventajas que vamos a tratar de analizar con el objetivo de disponer de toda la información posible antes de acudir a este mercado.

Y sí, es cierto que el mercado de palas usadas ofrece una inmejorable oportunidad para comprar barato. Pero antes de dar el sí definitivo, hay que estar muy seguro del producto que se va a obtener, analizando todos los factores y variables que rodean a la compra. Empezando por el propio precio. Si la diferencia no es muy grande entre el producto de segunda mano y el que nos ofrecen en la tienda es aconsejable optar por la segunda opción, especialmente por la garantía que nos otorga comprarla en un establecimiento.

También tendremos que tener en cuenta el tiempo de la pala seminueva, y no solo eso, tampoco debemos obviar el uso que se le ha dado a la misma. Una pala desgastada, con cientos de partidos y entrenamientos a sus espaldas probablemente sea una mala opción por mucho que salga ‘tirada’ de precio.

Importante, probarlas

Antes de adquirir la pala es aconsejable, si es posible, probarla dentro de la pista o, cuanto menos, comprobar de manera directa y presencial su estado. En muchos casos, los vendedores utilizan fotos de la pala en un perfecto estado y después, a la hora de recibirla, nos llevamos una ingrata sorpresa. Por eso, es importante cerciorarnos con exactitud de su estado, teniendo en cuenta el precio que vamos a pagar por ella, y evitar cualquier intento de timo.

El material de la pala también es un aspecto importante. Si el núcleo está fabricado con foam y, además, pesa poco es probable que se desgaste con mucha facilidad, debido a la poca durabilidad de estos materiales. Caso contrario sucede con la goma Eva, un compuesto mucho más resistente, y que en principio debe otorgarnos una mayor durabilidad.

Algunas de las palas de segunda mano más solicitadas son las pertenecientes a las marcas Akkeron, Vibora o Varlion, ya que sus modelos habitualmente gozan de una vida útil más larga que la habitual y siempre se encuentran entre las más demandas.

Con toda esta información disponible, queda en vuestra mano decidir si rastreáis en el mercado de segunda mano y ahorrar algo de dinero o, por el contrario, optar por la vía común y acudir a las tiendas de vuestra plena confianza.